Acusación falsa para cobrar un seguro de violación

A

Tres jóvenes estadounidenses presentaron recientemente sendas denuncias por agresión sexual contra tres jóvenes afganos residentes en la Comunidad de Murcia. El juzgado que instruye el caso nos sorprendió al asegurar que encuentra muchas “incoherencias, contradicciones y lagunas” en el relato de las tres jóvenes denunciantes; y recuerda, en el auto que decreta la libertad con cargos de los tres acusados, que ellas abandonaron el país pese a que se les advirtió la “necesidad de su colaboración” durante el proceso.

Las tres hermanas declararon que fueron acorraladas por los tres acusados en una zona oscura de un bar de Murcia durante la Nochevieja; pero según el juez, ese relato se contradice con la actitud propia de una persona que dice haber sido víctima de una agresión sexual.

Las cámaras de seguridad han jugado un papel clave en la resolución del caso. Este tipo de pruebas no son siempre legales. En este caso concreto las cámaras que captaron la despedida entre las jóvenes presuntamente violadas y sus supuestos agresores son las de la Estación de Autobuses que contarían con todas las garantías legales para que sus imágenes puedan ser utilizadas.

Parece que es habitual, al menos en otros países, que existan seguros en los que se cubra el riesgo de sufrir una agresión sexual.

Prácticamente, ya existen seguros para todo. Este tipo de seguros que cubren riesgos como una violación, de un tiempo a esta parte y, por ejemplo, en Estados Unidos a raíz del movimiento #metoo, se han popularizado mucho y llegan a ofrecer indemnizaciones con cantidades importantes. En el caso de las tres hermanas hasta los 50.000€.

La denuncia falsa

La Ley recoge el delito de denuncia falsa pero con una serie de condiciones previas. Tiene que haber una resolución judicial firme que tiene que haber puesto fin al procedimiento. Por eso acierta el abogado de los tres jóvenes a la hora de solicitar el archivo o el sobreseimiento antes de formular la denuncia por acusación falsa contra las tres hermanas estadounidenses.

La pena mayor a la que pueden enfrentarse las tres denunciantes por un delito de denuncia falsa es de dos años. Una pena pequeña para una acción con las consecuencias que puede tener: hablamos de una acusación grave ante una autoridad que tiene la obligación de investigarla; contra alguien y a sabiendas de que no se ha cometido delito alguno.

Los tres jóvenes afganos han tenido mucha suerte por el poco tiempo que ha pasado antes de que se hayan podido constatar las contradicciones que indica el juez.

El caso es que para reclamar la indemnización, las tres jóvenes denunciantes sólo necesitan la denuncia (aunque sea falsa) y la derivación a un centro médico y un tratamiento; que puede ser la píldora del día después.

¿Puede actuar la justicia contra las tres jóvenes que volvieron a EEUU?

La extradición no se va a producir porque esa denuncia falsa no se considera un delito grave. Podría haber una compensación para los acusados por la supuesta agresión y la tienen que pedir expresamente.

No es habitual que ante una denuncia falsa el acusado termine siendo condenado a pagar las costas del jucio en el que resulta exhonerado. Es más habitual que las costas sean pagadas “de oficio”.

Puedes escuchar la intervención completa en Más que Palabras de Radio Euskadi

Deja tu comentario